Lo que nos ocurre cuando jugamos es que aprendemos a través de emociones positivas. Cuando nos divertimos se activan las áreas cerebrales del placer (Área tegmental ventral, núcleo accumbens, el cuerpo estriado, la corteza cingulada anterior, el hipocampo, la amígdala y la corteza cerebral) y la motivación (área tegmentalventral, amígdala, hipocampo, tubérculo olfatorio, núcleo accumbens y la corteza prefrontal)
Otra de las cualidades que tiene el aprendizaje basado en el juego es que potencia el desarrollo infantil, promueve los aprendizajes y fomenta la interacción entre padres/madres e hijos/as.
El aprendizaje basado en el juego atrae la curiosidad natural de los niños/as y su deseo de participar en experiencias basadas en sus propios intereses únicos, a medida que entienden el mundo que los rodea
Para finalizar, podemos afirmar que el juego es un importante vehículo que tienen los niños para aprender y asimilar nuevos conceptos, habilidades y experiencias. Por ello, el juego es una herramienta pedagógica primordial en educación.