La sobrestimulación sensorial se refiere a una respuesta intensa y abrumadora ante los estímulos sensoriales del entorno, como luces, sonidos, olores y texturas. Para muchos niños neurodivergentes, estos estímulos pueden ser más intensos y difíciles de filtrar, lo que puede llevar a una sensación de saturación sensorial.
Para cuidar la experiencia de los niños y niñas, es importante crear entornos que se ajusten a sus necesidades sensoriales. Esto significa encontrar un equilibrio y ofrecer actividades que les ayuden a concentrarse y sentirse tranquilos. Evitar exponerlos constantemente a estímulos intensos, como sonidos fuertes o luces brillantes, puede marcar la diferencia en su bienestar y comportamiento.
Al respetar los límites sensoriales, contribuimos a un ambiente más armonioso y les damos la oportunidad de desarrollarse de manera más cómoda y feliz. Se trata de brindarles momentos de calma y permitirles disfrutar de experiencias que sean beneficiosas para su crecimiento y aprendizaje.
Entendiendo la sobreestimulación sensorial
Identificar la sobreestimulación sensorial implica estar atentos a ciertas señales. Los niños pueden manifestar irritabilidad, ansiedad, agitación o incluso recurrir a comportamientos de evitación, como taparse los oídos o cerrar los ojos. Además, la sobrecarga de estímulos puede generar fatiga mental y emocional, lo que afecta su bienestar general y capacidad para participar en actividades cotidianas.
En el contexto de la neurodivergencia, como el Trastorno del Espectro Autista (TEA) o el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), la hiperestimulación sensorial puede ser aún más pronunciada. Los niños y niñas con TEA, por ejemplo, pueden experimentar hipersensibilidad a ciertos estímulos, mientras que los niños y niñas con TDAH pueden tener dificultades para filtrar distracciones sensoriales y mantener el enfoque.
Reconocer y abordar la sobreestimulación sensorial es esencial para brindar un ambiente favorable al aprendizaje y el bienestar emocional. Proporcionar estrategias y herramientas que les ayuden a regular y adaptarse a los estímulos sensoriales excesivos es un paso fundamental en su apoyo y desarrollo. Es en este contexto que Kokoro Kids ha creado funcionalidades diseñadas específicamente para reducir la sobrestimulación sensorial, permitiendo a los niños y niñas disfrutar de experiencias de juego más cómodas.
Abordaje práctico con Kokoro Kids
Para hacer frente a esta situación y ofrecer un espacio de juego y aprendizaje adaptado, Kokoro Kids ha desarrollado funcionalidades diseñadas cuidadosamente. Estas herramientas están destinadas a proporcionar a los niños y niñas un ambiente más cómodo y libre de distracciones sensoriales excesivas.
- Reducción de estímulos visuales y auditivos: Esto significa que los padres y cuidadores pueden ajustar la cantidad de animaciones, gráficos y efectos de sonido en función de las necesidades sensoriales del niño/a. Esto crea un espacio menos abrumador y más enfocado en el juego y la interacción.
- Control del tiempo de juego: La fatiga sensorial puede acumularse con el tiempo, por lo que Kokoro Kids permite a los padres establecer límites de tiempo de juego. Esto es especialmente beneficioso para prevenir la saturación sensorial y asegurar que la experiencia de juego sea agradable y sostenible.
- Juegos relacionados con emociones: Entender y manejar las emociones es crucial para la regulación sensorial. Kokoro Kids ofrece juegos específicos que abordan las emociones, permitiéndoles explorar y reconocer sus emociones.
Estas funcionalidades no solo proporcionan a los niños un espacio de juego más adecuado a sus necesidades, sino que también empoderan a los padres y cuidadores para personalizar la experiencia de aprendizaje.
El vínculo y la regulación emocional
El vínculo entre el niño/a y sus cuidadores no solo influye en su desarrollo emocional y social, sino que también puede desempeñar un papel importante en la reducción y manejo de la sobreestimulación sensorial. Un vínculo seguro y sólido puede actuar como un ancla emocional, proporcionando seguridad y confianza a los niños cuando se sienten abrumados por estímulos sensoriales intensos.
El sube y baja constante de emociones que experimentamos todos, niños y adultos por igual, puede ser especialmente desafiante para los niños neurodivergentes. Aquí es donde el vínculo entre educadores, padres y cuidadores desempeña un papel crucial en la regulación emocional.
Estrategias prácticas para manejar la sobreestimulación sensorial
Cuando nos encontramos con esta situación es importante contar con herramientas prácticas para ayudarles a regularse y encontrar calma. Aquí te presentamos algunas estrategias que pueden marcar la diferencia en esos momentos desafiantes:
- Espacios de calma: Dedica un lugar tranquilo y cómodo donde los niños pueda retirarse cuando se sienta abrumados. Este espacio puede estar equipado con almohadas suaves, luces tenues u objetos que les reconforten.
- Respiración profunda: Aprende y enseña técnicas de respiración profunda, como inhalar y exhalar lentamente. Esto puede ayudar a reducir la ansiedad y restablecer el equilibrio emocional.
- Estimulación táctil: Proporciona objetos sensoriales como pelotas antiestrés o textiles suaves que puedan tocar y manipular para redirigir su atención.
- Música relajante: Tener una selección de música suave y relajante a mano puede ser útil para crear un ambiente tranquilo y reducir el estrés.
- Visualizaciones guiada: Guíale en una visualización creativa dónde imagine un lugar sereno y seguro. Esto puede ayudar a distraer su mente.
- Movimientos suaves: Realizar movimientos lentos y controlados, como estiramientos o movimientos de yoga, puede ayudar a liberar la tensión y aumentar la sensación de calma.
- Juegos de atención: Introduce juegos de concentración, como buscar objetos en una imagen o completar rompecabezas simples.
- Comunicación: Fomenta un espacio donde el niño se sienta cómodo compartiendo cómo se siente. Pregúntale qué estrategias le han funcionado en el pasado y anímale a probar diferentes enfoques.
En momentos de sobrestimulación sensorial, estas estrategias pueden ofrecer un alivio significativo y permitir que el niño recupere el equilibrio emocional. Como parte de nuestro compromiso en Kokoro Kids, hemos desarrollado funcionalidades específicas para reducir la sobrestimulación, pero también es fundamental contar con herramientas prácticas que puedan aplicarse en diferentes situaciones.
