Esto de las etapas es un clásico atemporal, la típica prenda de fondo de armario: nunca pasa de moda. No importa el lugar, el año, no importa nada: hay ciertas etapas por las que todos los niños pasan. Algunas son divertidísimas, otras pueden ser un poquito embarazosas, algunas pueden llegar a ponernos un poquito de los nervios; pero siempre hay dos cosas claras: uno, son impepinables; y dos, que todas vienen y se van.
Algunas de las etapas graciosas por las que pasan los niños
Etapa de “si existe, me lo zampo”
Es mundialmente conocido que los bebés son muy de llevarse todo a la boca: su comida, la cuchara, sus pies, sus juguetes… Durante esta etapa, nos tocará vivir en un estado de preocupación constante. Nos los imaginaremos ahogándose intentando chupar una pequeña pieza de sabe Dios qué que encontraron en sabe Dios dónde. Muy estresante, para qué nos vamos a engañar.
Eso sí, es totalmente cierto que cualquier precaución es poca durante esta etapa en la que nuestro principal trabajo es que el bebé se sienta –y esté –seguro.
La etapa del “¿y por qué?”
De entre la amplia variedad de etapas tocanarices divertidas por las que pasan los niños, hay una clara campeona: la del por qué. Empieza cuando el niño tiene alrededor de 2 años y, aunque parezca que dura TODA LA VIDA, suele durar un año y medio (vale, igual no es poco tiempo, ahora que lo pensamos…).
Durante esta etapa, los niños simplemente están obsesionados con saber por qué y cómo funcionan las cosas. Si lo piensas es muy bonito, la verdad.
También cabe destacar que no les gusta poner puertas al campo, así que no se ciñen solo al “por qué”, sino que también le dan al “cómo”, al “cuándo” y al “quién” como si no hubiera mañana. Aquí tenéis un bonito ejemplo de una conversación con un niño en plena etapa de curiosidad desmedida:
- Mamá, ¿dónde está Madrid?
- En España.
- ¿Y dónde está España?
- En Europa.
- ¿Y dónde está Europa?
- En la Tierra.
- ¿Y dónde está la Tierra?
- En el Sistema Solar.
- ¿Y dónde está el Sistema Solar?
- En la Vía Láctea.
- ¿Y dónde está la Vía Láctea?
- En el universo –obviamente no quieres entrar en movidas tipo “Grupo Local”, porque si no podemos estar horas con esto –.
- ¿Y dónde está el universo?
- EN TU NARIZ –es probable que no estuvieras pensando en esa parte de la anatomía humana, pero bueno, tampoco queremos traumatizar a nadie.
Pero eh, aunque esta etapa pueda ser un poco molesta a veces, recomendamos dar al niño que está pasando por ella buenas respuestas. Olvida los “porque sí” y los “porque no”, su cerebro es una esponja ahora mismo, ¡y su curiosidad es absolutamente maravillosa!
Además, tu hijo/a te considera la persona más inteligente del mundo, solo te admira, así que disfruta de este tiempo al máximo, lo echarás de menos dentro de unos años, créenos.
La etapa “nudista”
Esta etapa tiene una explicación lógica más allá de que les guste ir al fresco. Básicamente, durante el desarrollo de las habilidades motrices finas –manos y dedos –, la ropa se convierte en un parque de atracciones para los niños: botones, cremalleras, mangas, cordones… Sin embargo, que tu hijo/a esté desarrolando sus habilidades motrices finas es una cosa, y que se despelote delante de todo el mundo es otra muy distinta.
Afortunadamente, esta etapa dura menos que la etapa del “por qué”, y puede ser fácilmente corregida si haces saber a tu hijo/a que está mal desvestirse fuera de casa y/o delante de gente de fuera de la familia.
La etapa del “artista indomable”
También conocida como la etapa de “pintar paredes”. Durante esta etapa, los niños piensan que el mundo es su lienzo; y parece que no saben distinguir un folio de una pared…
Por suerte existe la pintura de pizarra, así que las paredes –o al menos algunas –pueden ser su lienzo, pero de verdad. Ya te hablamos sobre la pintura de pizarra en este post, ¡así que échale un ojo si necesitas inspiración!
La etapa del “¡NO, MÍO!”
Los niños descubren un mundo de maravillas y felicidad cuando aprenden a decir “no” y empiezan a explorar su individualidad. Lo mismo pasa cuando descubren lo que son las posesiones y empiezan a decir “¡es mío!” todo el tiempo. Lo malo es que durante esta etapa a veces se pasan de caprichosos y, aunque son increíbles diciendo “no” a todo, no se les da tan bien escucharlo. Sí, un pelín autoritario, lo sabemos.
Es muy importante para los niños que los padres (o adultos de su entorno en general) estén muy presentes durante esta etapa; ya que se trata de un período de rápido desarrollo intelectual (comprendido entre los 2 y los 5 años de edad). Necesitan tu apoyo, tus directrices… y algunos límites probablemente también; para qué nos vamos a engañar.
¡Esperamos que hayas encontrado este post útil! No dudes en contarnos por qué etapa está pasando tu hijo actualmente, ¡o qué etapa te supuso un esfuerzo más grande en su momento! Puedes dejarnos un comentario en este post, ¡o en nuestra página de Facebook!
